Tunja (Boyacá), 2 de abril de 2019.
Como resultado de la ofensiva nacional para contrarrestar el delito del microtráfico en entornos escolares de todo el país, la Fiscalía General de la Nación Seccional Boyacá ejecutó la Operación Gato Negro.
Con ella, se da un duro golpe a este fenómeno que afecta a los distribuidores mayoristas de marihuana y drogas sintéticas que son distribuidas en los alrededores de centros educativos, especialmente universidades.
Con la Operación Gato Negro se judicializan a 18 individuos (ocho mujeres y nueve hombres), entre productores, distribuidores, cobradores y transportadores, quienes afectaban dos importantes universidades y un colegio de Boyacá.
Asimismo, la investigación determinó que los tentáculos de esta red también llegaban a otros departamentos, es el caso de Cundinamarca, Cauca, y Santander.
Se estableció que el estupefaciente era trasportado hacia Bogotá para su venta al por mayor. Por lo que en la capital colombiana se capturó a un hombre y una mujer presuntamente dedicados al transporte de la sustancia.
Los operativos también se desarrollaron en tres municipios de Boyacá.
En Tunja se realizaron dos allanamientos con tres capturas; en Duitama tres allanamientos y tres capturas, adicionalmente una persona fue capturada en flagrancia y en Sogamoso se realizaron tres allanamientos que dieron como resultado ocho capturas.
De acuerdo con las indagaciones, esta red delictiva se abastecía en el departamento de Cauca, por ello los investigadores del Cuerpo Técnico de investigación de Boyacá se desplazaron hasta ese departamento donde se cumplió con la orden judicial de captura en contra de un hombre y una muejr quienes, presuntamente, proveía esta organización criminal.
Durante esta jornada masiva nacional, de la que hace parte fundamental la Seccional Boyacá, se saca de las calles una estructura que podía comercializar al por mayor hasta 150 kilos mensuales de marihuana y drogas sintéticas como el 2CB o cocaína rosada.
Con la investigación que se desarrolló con personal del CTI, Seccional Boyacá, durante ocho meses, se estableció que la organización se especializaba en la distribución en dos importantes universidades del departamento y que en su estructura, operaba la producción, transporte y distribución de sustancias psicoactivas logrando ganancias mensuales de hasta 300 millones de pesos, pues solo vendían el alucinógeno al por mayor a redes de microtráfico.
También, se determinó que Los Gato Negro les compraban la marihuana a disidentes del Frente Sexto de las desmovilizadas Farc y que la zona de producción se encuentra en Toribío, el acopio de la sustancia se realizaba en el municipio de Santander de Quilichao y desde allí se distribuía a varios municipios de Boyacá, Cundinamarca, Meta y Santander.
Durante esta jornada también se capturaron otras dos personas que estarían realizando narcomenudeo en varias instituciones educativas del departamento.
La Fiscalía hace pública esta información por razones de interés general.
MRB/DLBM