Los padres de la víctima fueron detenidos mediante orden judicial por el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía y la Sijín de la Policía.

Con medida de aseguramiento en centro de reclusión fueron afectados Edwin Alexis Rubiano Rubio y Natalia Lozano Tautiva, luego de que la Fiscalía les imputó cargos por el delito de homicidio agravado, al contar con suficientes elementos con vocación de prueba y evidencia física para inferir que le habrían causado la muerte a su propia hija de tan solo unas horas de nacida, al asfixiarla, en abril del año pasado.

Los hechos ocurrieron en un conjunto residencial del barrio El Salado de Ibagué (Tolima), donde las autoridades atendieron el llamado del vigilante del lugar, quien aseguraba que en el punto donde los residentes arrojan las basuras, se encontraba al parecer el cuerpo de un bebé recién nacido dentro de una bolsa plástica.

Según las informaciones recopiladas a través de entrevistas y labores de vecindario realizadas por los uniformados, el cuerpo fue hallado inicialmente por Edwin Alexis Rubiano Rubio, residente de uno de los apartamentos del conjunto ubicado exactamente en la carrera 8° con calle 5 de esa ciudad.

Según Rubiano Rubio, él llegó el 16 de abril con su esposa Natalia Lozano Tautiva y sus dos hijas de 9 años y de 23 meses, de un paseo en el que estuvieron por cerca de 4 días en un municipio de Cundinamarca, y al entrar al apartamento sintieron un olor nauseabundo que lo relacionaron de inmediato con una leche que se había descompuesto por haberla dejado afuera de la nevera.

Al día siguiente el olor persistió por lo que empezó a buscar de dónde provenía y fue así como llegó hasta la habitación de sus hijas y descubrió supuestamente sobre el armario, una bolsa con un bebé en estado de descomposición envuelto en una blusa de mujer, por lo que la sacó a la basura e informó al vigilante del conjunto.

Ambos aseguraron que no se violentó la puerta de su casa como para suponer que alguien había abandonado allí el cuerpo y mucho menos que la procesada hubiera estado embarazada, negando que fuera su bebé. No obstante, gracias al dictamen pericial de Medicina Legal se logró comprobar que las muestras de sangre halladas en la blusa en la que estaba envuelta la bebé, correspondían al ADN de Natalia.

La necropsia igualmente arrojó que la niña que tenía entre 38 y 40 semanas había nacido viva, y que la causa de muerte fue asfixia mecánica provocada por la obstrucción en sus vías respiratorias. También se le halló un hematoma en el paladar duro, lo que significa que le taparon su nariz e introdujeron al tiempo algo en su boca para evitar que respirara.

Al culminar la audiencia, el juez acogió los argumentos de la Fiscalía que expuso la peligrosidad que representan los procesados para sus tres hijas, ya que después de la menor asesinada, la pareja tuvo otra niña que cuenta con apenas unos meses de nacida.

La Fiscalía hace pública esta información por razones de interés general.

 

PAAM/DLBM