La procesada Jaqueline González Villada aceptó su responsabilidad en los hechos ocurridos el 25 de abril de 2014, cuando le exigió $2 millones a una mujer para no judicializar a su sobrino, supuestamente, capturado por porte ilegal de armas.
De acuerdo con lo establecido en la investigación, la víctima realizó la consignación a través de una empresa de giros a nombre de la capturada, quien se encontraba en la ciudad de Bogotá.
Luego de la imputación de la Fiscalía —en audiencias concentradas— por el delito de extorsión agravada, el juez de control de garantías dictó medida de aseguramiento domiciliaria para la mujer.
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