En audiencias concentradas, la Fiscalía presentó material que reafirmaría la peligrosidad que representa Edelberto Villarruel Hoyos y solicitó medida de aseguramiento en centro carcelario, petición que fue aceptada por un juez de control de garantías de Agustín Codazzi (Cesar).
En las diligencias, el indiciado fue imputado por acceso carnal violento agravado, secuestro simple y lesiones personales, delitos de los que habría sido víctima una pareja de hermanos de 9 y 10 años, respectivamente.
Los testimonios y otras evidencias en poder del Fiscal de conocimiento indicarían que el pasado 31 de julio, Villarruel Hoyos abordó a los dos menores de edad en la plaza principal del corregimiento Casacará, en Agustín Codazzi (Cesar), les ofreció dulces y se los llevó en contra de su voluntad en una moto.
Los menores de edad intentaron resistirse, pero habrían sido amenazados de muerte con un arma de fuego, luego fueron encerrados en una casa abandonada vía a la Serranía del Perijá y, al parecer, sometidos a violencia física y sexual. Los hermanos escaparon del lugar en un descuido del presunto agresor y de regreso al casco urbano contaron lo sucedido a sus familiares.
Ante la gravedad de los hechos, investigadores del CTI y de la Policía Nacional asumieron las indagaciones, obtuvieron declaraciones y videos de cámaras de seguridad en los que se ven los niños con el señalado abusador, entre otros elementos que permitieron ubicar la vivienda en la que ocurrieron los hechos e identificar al presunto responsable.
Edelberto Villarruel Hoyos fue capturado en una acción coordinada por el CTI de la Fiscalía y la Policía Nacional. En la verificación de antecedentes se constató que presenta anotaciones judiciales por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes; violencia intrafamiliar y hurto.
Los esfuerzos investigativos se concentran en establecer si esta persona estaría involucrada en otros casos de violencia sexual contra niños y adolescentes reportados en Agustín Codazzi y varios municipios de Cesar, y se espera que con la divulgación de su identidad víctimas y sus acudientes se acerquen a denunciar.
JLH/JARG