Los dos indígenas fueron encontrados colgados de un árbol, torturados y atados de manos con esposas.
La Fiscalía Seccional de Buenaventura (Valle del Cauca) asumió la investigación por el secuestro y las torturas que padecieron dos guardias indígenas de la etnia Nasa Emberá, Nasa-Kiwe.
Las víctimas fueron identificadas como José Gustavo Parra Gutiérrez y Sebastián Velásquez Gutiérrez, quienes aparecieron colgados de un árbol y esposados de sus manos en las afueras del resguardo La Delfina de Buenaventura.
Según las primeras versiones, los indígenas prestaban guardia en el resguardo desde las seis de la tarde. Hacia las 11 de la noche, un grupo de hombres llegó al resguardo portando armas de fuego, y con sus rostros cubiertos por capuchas, los despojaron de sus bastones de mando, se los llevaron y, posteriormente, aparecieron colgados cerca de La Delfina.
Un grupo de integrantes del resguardo, que los relevarían en la guardia, encontró abandonados los bastones de mando y dio aviso a los líderes de las comunidades Aisama y Nasa-Kiwe, que organizaron la búsqueda de sus compañeros.
Los guardias fueron hallados con signos de tortura, de acuerdo con el dictamen de los médicos que los atendieron en un centro asistencial de Dagua (Valle del Cauca), a donde fueron trasladados.
La Organización Indígena del Valle del Cauca (Orivac) hizo un llamado a las autoridades para que se investiguen los hechos de violencia que vienen ocurriendo en el resguardo La Delfina y que han cobrado la vida de Pablo Dagua y Adriana Montero Parra, del Resguardo Triunfo Cristal Páez de Florida.
La pareja había desaparecido de su casa ubicada en el corregimiento de La Delfina el pasado 26 de mayo de 2018. Tres días después fueron encontrados los cadáveres con impactos de bala. Lo que provocó un desplazamiento desde el resguardo indígena hacia Buenaventura.
JGPV/DLBM
