La Fiscalía General de la Nación expresa su preocupación por el hacinamiento que se registra en las salas de paso para detenidos de la sede principal Caribe de Medellín (Antioquia), donde en la actualidad hay 120 personas recluidas en un espacio diseñado para 50 personas.
La Fiscalía informa además, que el 12 de mayo en la noche se presentaron 20 casos de intoxicación, al parecer, por alimentos en descomposición que fueron suministrados por el Instituto Nacional Penitenciario y carcelario (Inpec).
Entre las personas privadas de la libertad figuran procesados que ya están condenados y cuyo sitio de reclusión, de acuerdo con el Código Penitenciario, deberían estar en penitenciarías cumpliendo con su proceso de resocialización.
El grado de hacinamiento en los calabozos de la Fiscalía obliga a disponer de investigadores con funciones de policía judicial al cuidado de los internos, limitando el trabajo operativo en procesos penales de vital importancia para la seguridad de la ciudad.
LFML/DLBM