Cuatro estudiantes de una universidad de Pereira (Risaralda) recibieron medidas de aseguramiento por su presunta participación en los delitos de concierto para delinquir agravado y tráfico, fabricación y porte de estupefacientes agravado.
Los jóvenes no aceptaron la imputación de cargos hecha por la Fiscalía, que los señaló de comercializar marihuana en una zona boscosa del centro educativo, en la que hay varios negocios informales de venta de comidas rápidas.
Varios testimonios recopilados en las investigaciones y la información proporcionada por docentes y otros integrantes de la comunidad educativa, permitieron identificar transacciones diarias de dinero y droga, las cuales fueron constatadas por un agente encubierto que individualizó a los hoy indiciados como los encargados de la actividad ilegal.
Uno de los cuatro estudiantes sería el cabecilla de esa red de distribución y, supuestamente, conseguía los estupefacientes en Santa Rosa de Cabal (Risaralda). Esta persona fue enviada a la cárcel y sus presuntos cómplices recibieron medida de detención domiciliaria.
PAAM/JARG