Una cicatriz de 70 centímetros en el estómago fue clave para dar con su paradero y capturarlo en Córdoba.
Daniel Amado Goez Tuberquia, alias Obander o Barriga Rajada, venía siendo buscado por la Fiscalía 124 Especializada de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario de Cali (Valle del Cauca), para que respondiera por el asesinato de Ana Rubiela Villada Rodríguez, educadora e integrante del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Valle – CUT, ocurrido el 27 de septiembre de 2001, en Sevilla (Valle del Cauca).
Para la época de la desaparición de la profesora, Goez Tuberquia era integrante del frente Cacique Calarcá del Bloque Calima de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), con presencia en el norte del Valle.
Aunque los jefes de este bloque, entre ellos Elkin Casarrubia Posada, segundo al mando del Calima, aseguró como hipótesis de la muerte de la profesora, sus presuntos vínculos con la guerrilla, se estableció que en realidad obedeció a la política de persecución, amenazas y asesinatos de los sindicalistas en el Valle del Cauca adelantada por el paramilitarismo.
El 3 de febrero de último, el Tribunal Superior de Cali confirmó la acusación de la Fiscalía que llamó a juicio a alias Obander, como presunto autor material de los delitos desaparición forzada, homicidio agravado y concierto para delinquir agravado. La decisión del Tribunal se dio bajo los términos de la ley 600 de 2000.
La desenterró
El crimen de la educadora Ana Rubiela Villada Rodríguez ocurrió el 27 de septiembre de 2001, cuando se dirigía a la escuela Arturo Piedrahita, en la vereda Alto Pijao de Sevilla, donde se desempeñaba como directora.
Un mes después, el 26 de octubre de 2001, un campesino reportó el hallazgo de un cuerpo en descomposición en un terreno de una finca en Alto Pijao. Los exámenes forenses confirmaron que se trataba de Villada Rodríguez.
La comunidad de Sevilla y los docentes del municipio protestaron por la desaparición de la profesora, pidiendo a los paramilitares del Bloque Calima que la devolvieran.
Durante las audiencias de justicia transicional, Ever Veloza, alias HH, y Elkin Casarrubia Posada, alias el Cura, comandantes de ese bloque, aseguraron que ordenaron a Juan de Dios Úsuga, alias Giovanny y a alias Siete, que devolvieran el cuerpo de la educadora para que fuera sepultada por sus familiares.
Para cumplir la orden, alias Giovanny ordenó a Siete y este a Daniel Amado Goez, alias Barriga Rajada, que dejará el cadáver en un lugar visible para que lo encontraran.
Alias Barriga Rajada fue al sitio donde asesinó y enterró a la mujer y la dejó abandonada en los terrenos de una finca, donde un labriego lo encontró y reportó el hallazgo a la Fiscalía.
Su cicatriz
En las diferentes audiencias por la muerte de la educadora, Elkin Casarrubia, segundo al mando del bloque paramilitar, se refirió en tres oportunidades a la responsabilidad de alias Obander o Barriga Rajada en el crimen.
“El hecho fue ordenado por alias Giovanny y Siete y ejecutado por un muchacho que le dicen Obander, esa era la chapa de él. Tenía la barriga rajada por una operación, lo que sé es que fue Obander, él participó en ese hecho y él fue a desenterrar a la profesora”, dijo Casarrubia ante los magistrados de Justicia y Paz.
Por este asesinato ya fue condenado Rafael Martínez Guevara, alias Panelo, otro de los paramilitares que participó en la desaparición de Ana Rubiela Villada Rodríguez.
El Juzgado 10 Penal del Circuito Especializado de Bogotá dictará en los próximos meses sentencia condenatoria contra Goez Tuberquia, quien fue capturado al ser reconocido por su cicatriz en el estómago entre otras 6 personas, como el autor material del crimen de la educadora de Sevilla.
JGPV/DLBM