En agosto del 2001, un grupo de paramilitares llegaron a la vereda Mururuy, en el municipio de Puerto Gaitán (Meta). Entre los muchos abusos cometidos, se llevaron consigo a tres hombres y una mujer.
De ellos apenas se ha conocido de la aparición de José Roberto Rincón, de 42 años. Sus restos fueron exhumados el 6 de marzo del 2012 por una comisión especial del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía Seccional Tunja en el municipio de Puerto Gaitán (Meta).
La acción fue realizada en la finca Cuatro Ases, en Puerto Gaitán. Además, encontraron otros dos cuerpos en ese predio.
Ahora, él será parte de un grupo de personas asesinadas por las autodefensas y lasFarc en la zona de los Llanos Orientales durante un lapso comprendido entre el 2000 y el 2012, cuyos cadáveres serán entregados a sus familiares este viernes en Villavicencio (Meta).
La ubicación de los cuerpos se supo gracias a información entregada por uno de los postulados al proceso de justicia y paz. La Subunidad de Exhumaciones de la Fiscalía indica que al parecer fueron calificados como guerrilleros y por eso los desaparecieron.
El postulado, en el marco del proceso amparado por la ley de justicia y paz, Deiber Andrés Bolaños Villalobos, alias 120, de las Autodefensas Campesinas del Meta y Vichada, relató acerca del lugar en que estas personas habían sido enterradas.