Por el delito de extorsión, jueces con funciones de control de garantías de Barranquilla profirieron medida de aseguramiento de detención preventiva en centro carcelario contra dos personas que en hechos aislados exigían dinero a sus víctimas para no atentar contra sus vidas ni las de su familia.
En el primer caso la Fiscalía le formuló cargos a Henry Manuel Herrera Barraza, luego de ser capturado cuando recibía de manos de la víctima supuestamente $2 000 000, como abono de los $10 000 000 exigidos por una persona que mediante llamadas y mensajes de textos se identificaba como el comandante Samir de Los Rastrojos.
El segundo caso se relaciona con Yira Herrán Soto, a quien la Fiscalía le imputó el delito de extorsión agravada, en el que la víctima era un comerciante que venía realizando consignaciones a su nombre por las exigencias telefónicas que le hacía una persona que se identificaba también como integrante de la banda criminal citada.
La mujer fue aprehendida por el Gaula en un operativo de entrega controlada, cuando retiraba $200 000 de una empresa de giros.
Los imputados fueron enviados a los centros de reclusión El Bosque y Buen Pastor, respectivamente, de la ciudad de Barranquilla.