Un fiscal de Derechos Humanos y DIH cobijó con medida de aseguramiento al ex cabecilla de autodefensas Salvatore Mancuso Gómez, como presunto determinador de los crímenes de un profesor y tres estudiantes de la Universidad de Córdoba.

Los hechos que motivaron la investigación ocurrieron en Montería entre marzo y mayo de 2000, cuando fueron asesinados el docente James Pérez Chimá, y los estudiantes Marly de la Ossa Quiroz, Pedro Manotas Oláscaga y Sheila María Oláscaga.

De acuerdo con lo establecido, el hoy extraditado Mancuso Gómez ordenó los asesinatos, porque supuestamente esas personas estarían fraguando planes para secuestrar a personalidades de la capital de Córdoba.