En una operación liderada por el Grupo de Bienes de la Fiscalía y la Policía Nacional Dijín se logró la recuperación de bienes que, según el Director de Justicia Transicional Carlos Fidel Villamil, podrían sumar unas 1500 hectáreas avaluadas en 2000 millones de pesos.

Villamil señaló que estas diligencias resultan “trascendentales en materia de restitución de los derechos de las víctimas y del cumplimiento efectivo que debe llevar la Fiscalía General de la Nación en materia de persecución  de bienes”.

Los bienes que fueron ocupados por las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá al mando de Vicente Castaño y de su familia, luego de desterrar a pobladores de la región, fueron objeto de medidas cautelares con el fin de entregarlos a sus propietarios y a la Unidad de Reparación de Víctimas. “Las Autodefensas utilizaron estos bienes para ejercer control territorial en dicha región para someter a sus víctimas, para financiar el conflicto armado”, agregó el funcionario.

La recolección de información en campo, en los municipios de San Pedro de Urabá (Urabá)  y Valencia (Córdoba), dio como resultado la ubicación de 21 predios que de acuerdo con las investigaciones fueron adquiridos con dineros producto del narcotráfico para financiar el conflicto o arrebatados a sus habitantes.

El Director encargado de la Dijín, coronel Luis Humberto Poveda, señaló que “en dichos bienes los paramilitares entrenaban a sus milicias; Vicente Castaño lo que buscó fue despojar de tierras y acrecentar su riqueza en el Urabá Antioqueño y en algunos municipios de Córdoba”.

 

LCRA/DLBM