La Fiscalía General de la Nación, ante el Juzgado 72 Penal Municipal de Bogotá, con funciones de control de garantías, imputó los cargos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito en contra de Jhon Jairo Torres Torres, y a su esposa Dora Emilce López Vega.

La delegada fiscal, en audiencia pública adelantada en el Complejo Judicial de Paloquemao, advirtió que fueron engañados cientos de compradores de vivienda en Yopal (Casanare) con la venta de terrenos y viviendas de origen ilícito, al parecer, producto del lavado de activos.

Aseguró que el mandatario local “se lucró del dinero de los ciudadanos con una promesa engañosa de compraventa de los bienes,  usado para pagar sus deudas y compromisos personales, cercanos a los 2 mil millones de pesos.

“Pretendió esconder la procedencia ilícita de los terrenos ubicados en la Ciudadela La Bendición en donde se construiría las viviendas por un valor cercano a los 36 mil millones por la obra, dinero del cual no es clara su procedencia”, manifestó la fiscal.

Por otra parte, a la señora López Vega se le endilga hacer parte de dos empresas de fachada, tipo SAS (Sociedad por Acciones Simplificada), mediante las cuales se administraban los capitales producto de las compras de los inmuebles.

Como elementos materiales de prueba, la Fiscalía cuenta con las conversaciones obtenidas  de interceptaciones telefónicas en donde se observa la manera como se planeaba encubrir el ilícito.

La fiscal del caso le dijo al juez que los terrenos eran de un reconocido narcotraficante  condenado y extraditado a España, bienes que estaban cobijados con medidas cautelares.

El ente acusador exhibió ante el juzgado la cantidad de propiedades en Bogotá y otras ciudades del país, vehículos y hoteles de propiedad del burgomaestre.

La pena que contempla el Código Penal de acuerdo con la delegada fiscal, varía entre los 10 y los 30 años de prisión por la gravedad de los delitos.

CMR/DLBM