El Juzgado Sexto Penal Municipal de Cartagena (Bolívar), con función de control de garantías, legalizó ayer la captura de 14 personas que al parecer pertenecen a la organización criminal Los Payasos, que delinque desde diferentes cárceles del país haciendo extorsiones. En total se materializaron 19 detenciones en varias ciudades.

La Fiscalía en las próximas horas les imputará los delitos de concierto para delinquir agravado y extorsión agravada.

Los detenidos fueron trasladados a la capital de Bolívar desde Neiva (Huila), Barrancabermeja (Santander), Bogotá, Manizales (Caldas), así como Bello y Medellín (Antioquia).

Tres capturas se legalizaron en Timaná (Huila), Cali (Valle del Cauca) e Ibagué (Tolima), y dos personas fueron notificadas en prisión; uno en la cárcel La Modelo de Bogotá y el otro en la misma ciudad, pero en su lugar de residencia donde tiene el beneficio de detención domiciliaria.

Desde el 2014 los detenidos extorsionaban a ciudadanos de Cartagena y municipios vecinos a través de llamadas desde centros penitenciarios del país asegurando que pertenecían a las bandas criminales de Los Rastrojos Costeños, Los Urabeños y La Oficina de Envigado.

Estas personas supuestamente exigían a sus víctimas equipos de comunicación como radios satelitales, cajas de municiones, equipos de intendencia y armas de fuego de uso privativo de la fuerza pública, a cambio de no atentar contra su vida.

Otra manera de operar de Los Payasos era con “Tío-Sobrino”, que consiste en utilizar los datos personales de contacto que las personas socializan a través de redes sociales en internet o que descuidan en sitios públicos, para llamarlos haciéndose pasar como funcionarios de la Policía. De esta manera le aseguran a la persona que tienen capturado a un familiar por algún delito y le ofrecen su liberación sin el trámite legal policivo a cambio de grandes sumas de dinero, que debían ser consignados a distintos puntos de giros de las ciudades.

En este caso se estableció que el monto menor que cobraban era de $500 mil, y que llegaron a exigirle a una víctima hasta $50 millones. Según la investigación, hay consignaciones que les hicieron hasta por $5 millones.

 

 

JLH/DLBM