Con una intervención sobre cómo articular los conceptos centrales de la estructura de la sociedad contemporánea, como estado, sociedad y empresa; el Fiscal General de la Nación, Eduardo Montealegre Lynett clausuró el Noveno Congreso de Minería y Petróleo que se realizó en Cartagena.
Indicó el Fiscal que para dicha articulación se deben tener en cuenta tres elementos fundamentales. En primer lugar el fortalecimiento institucional del sistema jurídico, para lograr una coherencia y una estabilidad del sistema judicial en la adopción de decisiones; este elemento es básico y primordial en el desarrollo económico.
El segundo es el equilibrio entre el crecimiento económico y los derechos fundamentales, como modelo de desarrollo. Consiste en buscar ese equilibrio entre los valores y principios constitucionales y la economía del mercado, donde no se le ponga freno a la locomotora del desarrollo pero si límites con base en el discurso de los derechos fundamentales.
Es decir que no se puede entender el desarrollo en términos del simple crecimiento económico, sino entender el desarrollo como libertad en el marco de la teoría de los derechos fundamentales. “No sirven las garantías formales si no existen garantías reales”, explicó el Fiscal Montealegre.
Y el tercer elemento es la adopción del concepto de constitucionalismo aspiracional y militante como revolución, en la que los tribunales constitucionales deben tener un papel activo en la construcción de políticas públicas, pero en el que los sectores de la sociedad y las minorías tienen que acudir ante estos tribunales como último recurso para la protección de sus derechos consagrados en las cartas políticas.