Una vez finalice el conteo de los 11 millones de dólares, aproximadamente, incautados en Buenaventura y se verifique la autenticidad de ese dinero, un fiscal especializado iniciará el trámite de extinción del derecho de dominio.

La Fiscalía también abrirá de oficio investigación por la posible comisión del delito de lavado de activos.

El dinero que fue hallado en bultos repartidos en dos contenedores provenientes de México, ya está en custodia del Banco de la República.