Cinco cuerpos de personas asesinadas por grupos delictivos que habían sido sepultados en los municipios caldenses de Pensilvania y Riosucio, fueron exhumados por miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía.

La acción fue realizada por el grupo de Identificación Humana del CTI Risaralda en apoyo a un Fiscal de la Dirección de Fiscalía Nacional Especializada de Justicia Transicional, grupo Exhumaciones, de Medellín (Antioquia).

Tres de las diligencias judiciales se desarrollaron en el cementerio San Vicente de Paúl, de Pensilvania, donde se recuperaron igual número de cuerpos en reducción esquelética. La información fue entregada por un postulado e igualmente confirmada mediante investigaciones de la policía judicial.

Los otros dos cuerpos fueron localizados en la vereda Bajo Cabarga, finca Punto Lindo, de Riosucio. Al parecer, las víctimas fueron ejecutadas por integrantes de la guerrilla entre los años 2007 y 2009. Así lo mencionó en sus versiones libres un postulado, quien se encuentra procesado en el marco de la Ley 975 de Justicia Transicional, que los acompañó a la diligencia para indicar su ubicación.

Esta misma persona señaló otros puntos, realizando los peritos del CTI una diligencia de prospección en zona rural de la vereda Cristales, corregimiento de Florencia, municipio de Samaná (Caldas), en donde se realizaron 15 pozos de sin resultados positivo.

Los restos reposan en el laboratorio del Cuerpo Técnico de Investigación de la capital risaraldense para dar inicio con las labores de identificación.

 

PAAM / AAEA