En hechos aislados, Carlos Alberto Marín Osorio y Carlos Alfredo Vargas Toro fueron capturados en flagrancia transportando por vías de Caldas 65 kilos de clorhidrato de cocaína.
Una fiscal de la Dirección Especializada contra Narcotráfico (Decn) los judicializó y un juez los cobijó con medida de aseguramiento intramuros por el delito de tráfico de estupefacientes agravado.
Uno de los hechos se registró en el sector de La Manuela, en la vía que comunica a Chinchiná con Manizales. Policía de Carreteras de Caldas que se encontraba en labores de patrullaje requisó un vehículo, conducido por Marín Osorio. En la requisa se percataron que en el platón faltaban algunos tornillos y había indicios de pintura reciente. Por esta razón decidieron perforarlo con una broca, la cual salió impregnada con una sustancia blanca, lo que les permitió descubrir en un compartimiento 35 paquetes con clorhidrato de cocaína.
El otro caso se registró en el sector Hojas Anchas, en la vía que de Supía conduce a Caramanta (Antioquia). Según lo que dio a conocer en las diligencias el ente acusador, policías de carreteras le pidieron a los tres tripulantes de un vehículo de placas NCQ537, dos mujeres y un hombre, bajarse para una requisa.
Al parecer el conductor, antes de que revisaran el carro, les habría hecho un ofrecimiento económico a los uniformados asegurándoles que transportaba marihuana. No obstante, los policías los condujeron hasta las instalaciones de la estación y al requisar el auto encontraron en el piso modificado del mismo 30,5 kilos de clorhidrato de cocaína.
El conductor declaró que el alijo era de su propiedad y que sus acompañantes no tenían conocimiento de lo que transportaba en su vehículo, por los cual fueron dejadas en libertad.
Ambos vehículos fueron incautados.
La Fiscalía General de la Nación habla con resultados.
JLM/CFG/MMY
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