Un fiscal especializado de Barranquilla profirió resolución de acusación en contra de Javier Mauricio Murcia Sánchez y Luis Fernando Pino Cortes, ex policías, como presuntos responsables de los delitos de secuestro simple en grado de tentativa y hurto calificado agravado.

El 8 de febrero de 2006 los ahora procesados con el pretexto de una requisa detuvieron un vehículo en el que iba un comerciante; en ese momento fueron interceptados por tres particulares que obligaron a la víctima a subirse al automotor por ellos utilizado.

El comerciante pudo escapar de ese automóvil, pero sin sus pertenencias que le fueron hurtadas por los captores.

Posteriormente, labores de inteligencia permitieron identificar e individualizar a los agentes involucrados en la actividad ilegal.