La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia condenó a 96 meses de prisión a Raúl Alberto Grajales Lemos y a su contadora,  Sonia Trejos  Aguilar, por el delito de lavado de activos.

Asimismo, recibieron una pena de 84 meses de cárcel Gerardo Antonio Grajales Lemus y María Nancy Grajales Posso como coautores de los delitos de  concierto para  delinquir y lavado de activos.

La Unidad de lavado de Activos de la Fiscalía demostró ante la Corte que Raúl Grajales Lemos asumió la presidencia de Grupo Grajales desde 1999, cuando empezaron a administrar los bienes y capitales provenientes del narcotráfico.

“El 10 de enero de 2005, en Panamá, en un allanamiento realizado a un predio de Lorena Henao de Montoya, viuda del narcotraficante Iván Urdinola, fueron hallados documentos que comprueban el blanqueo de capitales por medio de créditos ficticios” sostuvo el fiscal del caso.

En los contratos se establecía la compraventa entre Gerardo Antonio Grajales Hernández, en representación del Grupo Grajales, y Lorena Henao del 60 por ciento de las acciones de la sociedad. Ese dinero tenía origen en el narcotráfico.

Además, se pactaba el préstamo de 3 mil millones de pesos de Lorena Henao a la familia Grajales.

Para la Fiscalía, se trató de la administración de dineros del extinto narcotraficante Iván Urdinola producto de actividades ilícitas y se pretendió darles apariencia de legalidad por intermedio de las empresas del Grupo Grajales.