El Juzgado 19 Penal del Circuito de Medellín condenó a penas de 30 años y de cuatro años de prisión a un capitán, dos sargentos, un cabo y 11 soldados profesionales por los homicidios de Arley de Jesús Vallejo Cardona y Yon Freddy García Cardona.

El 25 de mayo de 2006, al noroccidente de Medellín las víctimas, que trabajan en un negocio de venta de arepas, se dirigieron hasta el barrio Guayabal a entregar un domicilio. Cuando regresaban a la casa materna desaparecieron.

Al día siguiente, los cadáveres de los jóvenes aparecieron en Medicina Legal reportados como muertos en combate por unidades del Batallón de Infantería No. 32, que informó de un enfrentamiento el día anterior entre los soldados y los supuestos bandoleros.

De acuerdo con la decisión del juzgador: Robinson Jhon Edgar Lozano Garnica, capitán; y Sergio Ezequiel Rojas Ochoa, sargento viceprimero, fueron condenados a 30 años de prisión por su responsabilidad en el delito de homicidio en persona protegida en calidad de determinadotes.

Igualmente: Ismael Enrique Romero Martínez, sargento primero; César Felipe Castillo, cabo segundo, Carlos Alberto Villa Cañón; y los soldados profesionales Gildardo Antonio Montoya López, Dayro de Jesús Henao Posso, Juan Javier Gallego Varelas, Joaquín Ferney Hidalgo Higuita y Román Albeiro Gutiérrez Jaramillo, fueron sentenciados a la misma pena en calidad de autores materiales.

Por último, el Juzgado decidió imponer una pena de cuatro años de prisión contra: Alberto Elías Pérez Arango, Hugo Albeiro Zuluaica Gaviria, Sergio Alonso Pérez Restrepo, José Evaristo Mosquera Delgado y José Heriberto Hernández Parra, por ser autores materiales del delito de encumbrimiento por favorecimiento del delito de homicidio en persona protegida.

Los militares condenados por el delito de homicidio en persona protegida en calidad de determinadotes y autores materiales, también deberán pagar una multa de 2.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes, así como 25 SMLMV por perjuicios morales. Igualmente, el juzgador ordenó la suspensión inmediata de los sentenciados de sus cargos.