La jueza 17 penal municipal de Bogotá, con función de control de garantías, avaló y dio luz verde a la solicitud del fiscal 14 especializado de la Unidad de Lavado de Activos de conceder la prórroga al principio de oportunidad a José Norbey Garzón Fierro, uno de los implicados en el desfalco a la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian).
Con esta determinación, se suspende por un año más la persecución penal contra los delitos de falsedad en documento privado y exportación ficticia.
Durante la diligencia, el fiscal del caso señaló que con la decisión, Garzón Fierro continúa como testigo de cargo en favor del ente acusador, con el compromiso de entregar la información para desvertebrar la red que causó la millonaria defraudación a la Dian.
José Norbey Garzón Fierro había sido favorecido con el principio de oportunidad desde el pasado 21 de marzo del 2012. Mediante resolución emitida por la Fiscalía, se le prolongó el beneficio gracias a su colaboración al hacer entrega de 26 carpetas en las cuales aparecieron documentos referentes al manejo ilícito de los cobros que se adelantaban de manera fraudulenta.
El fiscal del caso señaló que el principio de oportunidad se venció el pasado 26 de marzo, razón por la cual se hacía necesaria la prórroga, pues su información es importante para lograr la verdad, la justicia y la reparación en el proceso.
Garzón Fierro permanece detenido desde el 22 de julio del 2011, luego de ser cobijado con medida de aseguramiento en establecimiento carcelario. El 5 de octubre del 2012, la jueza 7ª especializada profirió fallo de condena por 263 meses y una multa de 18 mil salarios mínimos mensuales legales vigentes en contra de Garzón Fierro, quien fue conducido a un patio especial de la cárcel La Picota, al sur de Bogotá.
Según la Fiscalía, desde el 2006, mediante empresas ficticias que pusieron a funcionar en varias ciudades del país y utilizando documentos falsos, entre ellos pólizas y facturas con las cuales se demostraban compras también ficticias, los integrantes de la red se apoderaban de los dineros que la Dian devolvía por concepto del IVA por exportaciones e importaciones de cuero, chatarra y textiles.