Por solicitud del Fiscal 23 Especializado, un juez penal del circuito de Bogotá ordenó, en segunda instancia, que se recluyera en establecimiento carcelario a Liliana Marcela Castillo Borja, a quien se le imputó el delito de secuestro simple agravado.
Castillo Borja había aceptado cargos por el secuestro simple agravado de una niña de 17 meses de nacida en el Hospital Meissen de Bogotá el pasado 9 de enero. De una cafetería ubicada frente al centro asistencial huyó con la menor luego de engañar a su madre y duró casi cuatro días huyendo de las autoridades.
El juez revocó la decisión proferida el pasado 6 de enero por el Juez 31 Penal Municipal de Bogotá, con función de control de garantías, quien consideró en su momento que esta mujer no era un peligro para la comunidad y la dejó en libertad, luego de la aceptación de cargos.
En esa ocasión, el juez se abstuvo de imponer medida de aseguramiento en su contra al considerar que ella no actuó para cobrar por la liberación de la menor, ni pretendió esclavizarla, sino que de este modo quiso reemplazar la pérdida de su hijo durante el embarazo, lo cual le pudo ocasionar problemas emocionales.
Sin embargo, en la segunda instancia se consideró que Castillo Borja sí es un peligro para la comunidad y dio respaldo a la petición del fiscal del caso, quien argumentó que la defensa no pudo probar una afectación sicológica de la imputada al momento de los hechos.
Tras la decisión, la joven de 23 años fue enviada de inmediato a la cárcel del Buen Pastor de Bogotá.
