Un fiscal delegado ante el Tribunal Superior de Bogotá dejó en firme la resolución de acusación proferida por un fiscal de Derechos Humanos y DIH en contra de Luis Gonzaga Enciso Barón, coronel (r) de la Policía, por su presunta responsabilidad en los delitos de tortura y privación ilegal de la libertad.

Los hechos motivo de investigación ocurrieron el 24 de agosto de 1994, cuando el particular Wilson Gutiérrez Soler fue retenido en la calle 63 con carrera 13 de Bogotá por integrantes del Unase de la Policía al mando del hoy acusado. Según lo establecido esa persona fue sometida a torturas.

El 30 de septiembre de 1998 el Tribunal Superior Militar cesó el procedimiento contra el oficial Gonzaga Enciso. En este caso la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado colombiano por violación de la Convención Americana de Derechos Humanos.

Posteriormente, la Procuraduría General de la Nación presentó acción de revisión a la Corte Suprema de Justicia que el 17 de septiembre de 2008 ordenó la reapertura de investigación para el juzgamiento y sanción de los responsables.

El proceso fue asignado a la Unidad Nacional de Derechos Humanos y DIH, uno de cuyos fiscales profirió la resolución de acusación e impuso medida de aseguramiento a Enciso Barón que está prófugo de la justicia.