Principio de oportunidad es un mecanismo judicial, en el que la Fiscalía General de la Nación interrumpe, suspende o renuncia a ejercer la acción penal en contra de una persona vinculada a una investigación.
Aquí hay un componente importante de justicia. El ciudadano beneficiado deberá aceptar su responsabilidad en los hechos que se le atribuyen, reparar el daño causado y, si es del caso, colaborar activamente en la identificación de otros involucrados. Es decir, ayudar a la Fiscalía a obtener la verdad sobre el caso investigado.
¿Cómo se solicita?
La persona interesada, a través de su apoderado, hace la solicitud al fiscal que dirige el proceso en su contra y detalla la manera en la que puede colaborar con la justicia o cumplir los requisitos exigidos.
El fiscal del caso hace las valoraciones de rigor. Si la petición se ajusta a los parámetros de ley, le solicita al Fiscal General de la Nación que otorgue el principio de oportunidad. ¡Importante! La acción penal solo se suspenderá si, durante un periodo de hasta tres años, el solicitante cumple los compromisos adquiridos y respeta lo acordado.
Para tener en cuenta…
Antes de la aplicación del principio de oportunidad, la Fiscalía debe ponerlo a consideración de un juez de control de garantías, quien en últimas decide si lo aprueba o lo rechaza.