El prevaricato es un delito que se le atribuye a los servidores públicos que realizan actos indebidos en el ejercicio de sus funciones, sea por acción o por omisión. En este video te explicamos cómo se configura esta conducta delictiva y cuáles son las consecuencias legales que conlleva.
Es un delito cometido por servidores públicos que, en el ejercicio de sus funciones, profieren resolución, dictamen o concepto contrario a la ley o se abstienen, retardan o rehúsan a cumplir las tareas que su cargo exige.
Hay dos tipos de prevaricato. Por acción o por omisión.
Se configura el prevaricato por acción cuando un servidor público emite une resolución, dictamen o concepto, que claramente está prohibido por la ley y, consciente de la ilicitud, lo hace.
De otra parte, el prevaricato por omisión ocurre en los casos en los que un funcionario omite, retrasa, deniega o se rehúsa a ejercer un acto de su responsabilidad y competencia.
Cuando el delito se comete por acción, el servidor público se expone a una pena de 4 a 12 años de prisión.
Ahora, si la conducta ilícita es producto de una omisión, la pena oscila entre los dos años y dos meses; y los siete años y seis meses de prisión.





