Fuente: El Colombiano
Una pequeña cadena de tiendas de ropa y artesanías, localizadas en el sur del país, funcionaba como una fachada para traficar armas, intendencia, comida y otros elementos de logística para las disidencias de las Farc.
Así lo expuso la Fiscalía en el proceso penal contra César Rafael Tocagón Peña, un ecuatoriano comerciante de ropa, a quien señaló de ser “uno de los mayores proveedores de armas” para la organización criminal.
El fiscal Javier García, delegado contra la Criminalidad Organizada, recalcó que los contactos del comerciante en el bajo mundo eran, presuntamente, Alexánder Díaz Mendoza (“Calarcá”) y Miguel Botache Santillana (“Gentil Duarte”), cabecillas de la disidencia autodenominada Bloque Jorge Briceño. Este último fue asesinado en Venezuela al parecer a manos de sus enemigos de la otra disidencia conocida como Segunda Marquetalia, el pasado 4 de mayo.
Lea la noticia completa aquí.