El Juzgado 1° Penal del Circuito de Pereira (Risaralda) condenó a 20 años de prisión a Carlos Mario Grajales y Alejandro Patiño Giraldo, por el concurso de delitos de homicidio simple y hurto calificado agravado, del que fue víctima el comerciante Hernando García Sepúlveda, el 1 de octubre de 2015.
Los encartados preacordaron con la Fiscalía el pasado 29 de junio, consiguiendo que les quitaran el agravante del homicidio, y tras aceptar libre y voluntariamente el hurto calificado agravado, obtuvieron una rebaja en la pena.
La Fiscalía contaba con un vídeo de seguridad de una empresa de chance ubicada en la carrera 6° con calle 17, en la esquina de la bodega de la bisutería donde ocurrieron los hechos, en el que quedó registrado el movimiento sospechoso de los procesados, antes y después del crimen.
Germán Darío Londoño, empleado de confianza de la víctima, fue interrogado poco después, develando el plan criminal en contra del comerciante, propietario de un reconocido restaurante de la ciudad, quien señaló a los condenados y a la señora Mónica Andrea Arteaga Mejía, como autores del hecho.
Contra ellos fue emitida una orden de captura el 10 de noviembre de ese mismo año, que se materializó al día siguiente. En las audiencias de control de garantías ante el Juzgado 6° Penal Municipal, se les imputó el homicidio agravado y el hurto, y se les dictó medida intramuros a los tres. Posteriormente le fue revocada a la mujer, a quien se le señaló como determinadora a título de dolo. Actualmente está a la espera de audiencia preparatoria fijada para el 22 de septiembre.
Aunque la decisión no fue apelada por la Fiscalía, su representante sí dejó constancia que se había celebrado un preacuerdo en el que se le dictarían 20 años a Carlos Mario, y 18 para Alejandro, porque fue quien contrató a quienes segaron la vida de García Sepúlveda; pero su defensa sí apeló y en 5 días hará la sustentación por escrito ante el mismo despacho.
Por estos hechos también fue condenado previamente Yon Hever Sánchez Díaz, mientras que Londoño fue sentenciado por el hurto de $600 millones entre joyas y dinero en efectivo que sacaron de la caja fuerte de propiedad de García Sepúlveda, luego de violentarla.
PAAM/DLBM