Un fiscal de Derechos Humanos y DIH halló méritos para cobijar con medida de aseguramiento, detención preventiva sin excarcelación, a Henry Cortés Torres, ex concejal de Barbosa (Santander), por su presunta responsabilidad en los delitos de homicidio agravado y concierto para delinquir agravado.
Los hechos motivo de investigación ocurrieron en la noche del 9 de agosto de 2001, cuando cuatro hombres que llegaron en un taxi al bar Gato Negro, ubicado en la zona de tolerancia de Barbosa, dispararon contra varios de los allí presentes.
La acción ejecutada por miembros del bloque paramilitar “Lanceros de Vélez” dejó como resultado un muerto y con heridas a Carlos Alirio Vargas (dueño del bar), y a Seferino y José Morales.
Como el estado de salud de Vargas y de Seferino Morales era delicado, se decidió su traslado al hospital de El Socorro(Santander), pero la ambulancia que los transportaba fue interceptada por una camioneta de la que bajaron varios hombres, quienes remataron a los heridos.
Durante esos hechos falleció a consecuencia de un infarto cardíaco Teresa Soto Villar, compañera sentimental de Vargas, quien iba en el vehículo de socorro. Tanto el conductor de la ambulancia como la enfermera resultaron ilesos.
En este proceso ya han sido proferidas tres sentencias condenatorias. Cortés Torres está privado de la libertad en la cárcel Modelo de Bucaramanga.





