Por su presunta complicidad en la muerte del particular José ángel Higuita, la Fiscalía profirió resolución de acusación en contra del soldado Alonso de Jesús Rivero Díaz.
El 13 de noviembre de 2005, Higuita, residente en Dabeiba (Antioquia), salió hacia el sitio denominado Godó donde se dedicaba a tapar huecos en la vía como medio de subsistencia. Higuita no regresó a su casa ese día y en el lugar donde había trabajado fueron encontradas su bicicleta y sus herramientas.
El 14 de noviembre Higuita fue identificado por sus familiares en la morgue de Chigorodó, a donde fue remitido el cuerpo tras su muerte en supuesto combate con tropas regulares.
De acuerdo con lo establecido, los militares, presumiblemente, llevaron a Higuita hasta Chichiridó donde le cambiaron las prendas civiles por un camuflado nuevo, y luego lo asesinaron. Posteriormente le colocaron un radio de comunicaciones y una pistola 7.65, elementos en malas condiciones según informes periciales, y lo señalaron como subversivo de las Farc.
Rivero Díaz, encargado de las comunicaciones de la patrulla involucrada en los hechos, deberá responder ante un juez por el delito de homicidio en persona protegida.
Por este punible también fueron vinculados al proceso las siguientes personas: Juan Esteban Muños Montoya, subteniente; Jorge Andrés Estupiñán Chamorro, sargento segundo; Jhon Audrey Rincón Salgado, cabo tercero; y el soldado Adrian Ramiro Puentes Arrieta, adscritos a la XVII Brigada del Ejército con sede en Carepa (Antioquia).
