A la base de la Armada Nacional en Cartagena (Bolívar) y al Batallón de Infantería N° 1 de Corozal (Sucre) fueron enviados respectivamente tres Infantes de Marina y un Suboficial de la Armada, quienes están presuntamente involucrados en la desaparición de 20 kilos de cocaína que hacían parte de la media tonelada que fue incautada en septiembre de 2014.
Se trata de Luis Alberto Vidal Morales, Michael Andrés Rubiano Aguirre, Jaime Andrés Sánchez Sánchez, y el suboficial, Martín Antonio Serrano Barrios, a quienes un fiscal especializado les imputó el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado.
El Juzgado Sexto con funciones de control de garantías de la ciudad profirió esta medida de aseguramiento intramuros al encontrar que había una posible participación de los uniformados en el hurto de esta droga.
La cocaína fue incautada por parte del CTI y la Armada Nacional durante una diligencia de allanamiento a un inmueble denominado Playa Bonita, ubicado en el corregimiento de Punta Canoa (Cartagena), caserío Arroyo de Piedra, en el que funcionaba un centro de acopio para enviar droga hacia Centroamérica.
Es de recordar que los indiciados fueron detenidos por servidores del CTI Seccional Bolívar en las instalaciones de Guardacostas el pasado viernes 30 de enero.
Lo incautado sería propiedad de organizaciones ilegales al servicio del narcotráfico, las cuales pretendían acondicionar este sector como punto de partida de embarcaciones con alcaloides hacia países como Costa Rica, Honduras y Panamá.
El 15 octubre de 2014, día en el que se iba a realizar la destrucción del estupefaciente en presencia de la Procuraduría, un fiscal delegado, personal del CTI y la Armada, se detectó el faltante de la droga. Fue así como el procurador instauró la denuncia abriendo la respectiva investigación por la justicia ordinaria.
PAMM/DLBM
