Ante un juez de control de garantías, José Antonio Negrete López, alias Moña, aceptó su responsabilidad por el delito de concierto para delinquir gravado con fines de narcotráfico; sin embargo, no aceptó los delitos de homicidio y porte ilegal de armas, que también le fueron endilgados por el ente acusador.
La aceptación de cargos de Negrete López se da ante el abundante material probatorio recolectado durante la investigación adelantada por la Policia Judicial Especializada de Crimen Organizado Grupo de Apoyo Regional – Montería.
De acuerdo con las indagaciones, al parecer alias Moña era el encargado de coordinar la obtención de recursos para el Clan Úsuga a través de secuestros y extorsiones. Además, tendría a su cargo una estructura criminal conformada por al menos 14 delincuentes encargados de efectuar los cobros y ejecutar homicidios en diferentes municipios del oriente del país.
Actualmente, estáría actuando en el departamento del Meta, principalmente en los municipios de San Martin, Acacías, Cubarral, Puerto López, entre otros. Además, trabajaba para fortalecer sus negocios de narcotráfico al exterior.
Negrete López, durante el 2002, fue hombre de confianza de alias Fernando Pico (Jesús María Rivero Pico), jefe urbano del bloque Héroes de Tolová́, siendo miembro de la red urbana en el municipio de Valencia (Córdoba).
En su contra se adelantan procesos por los delitos de homicidio, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y amenazas personales y se encontraba en Bogotá gestionando negociaciones ilícitas con otras organizaciones delincuenciales.