Ante el Juzgado 46 Penal de Bogotá con función de control de garantías, Diego Julián Gallego Rendón aceptó los cargos que la Fiscalía le imputó por tráfico o porte de armas y municiones de uso privativo de las Fuerzas Militares.

De acuerdo con la investigación adelantada por un fiscal de la Unidad Antiterrorismo, uniformados de la Policía Nacional recibieron una llamada anónima que daba cuenta del hurto de un vehículo Renault 4 que sería usado con fines terroristas y que se desplazaba por la vía que del municipio de Dabeiba (Antioquia) conduce a la población de Mutatá, en el mismo departamento.

Después de interceptar e inspeccionar el vehículo, los policiales encontraron el armamento, entre este una pistola calibre 765 con silenciador, oculto en el baúl que tenía doble fondo.

Gallego Rendón permanece privado de la libertad en un centro carcelario de Facatativá (Cundinamarca) por otros procesos a los que fue vinculado como presunto responsable de secuestro agravado y abuso sexual.