Cada vez son más frecuentes los casos de delitos que inician con un simple “match”. Las aplicaciones de citas se han convertido en escenarios propicios para que delincuentes perfilen a sus víctimas. Estudian su estilo de vida, ganan su confianza y los citan en lugares estratégicos para cometer robos, extorsiones, e incluso agresiones físicas, secuestros y homicidios. Las víctimas más frecuentes son personas extranjeras. Ante esta realidad, expertos recomiendan medidas simples pero vitales. Aquí te contamos más detalles…
En el entorno social en el que nos encontramos actualmente hemos evidenciado cómo esa interacción social se ha trasladado a todas estas redes sociales y aplicaciones que existen hoy en día.
Evidenciamos que las personas que ya tienen esa connotación o ese conocimiento de estas redes sociales perfilan a las víctimas y tratan de abordarlas y llegan al punto en que se ganan su confianza por medio de estas redes sociales, perfilan su estatus de vida y las abordan de una manera muy eficiente para poder tener encuentros con ellos, tanto en los domicilios como en lugares que ellos ya conocen.
Existen varios modus operandi que se utilizan por medio de estas aplicaciones.
Uno de ellos es tratar de abordar a la víctima para luego poder convencerlos de que los lleven a su domicilio. Otra forma es citarlos en establecimientos públicos que ellos ya tienen identificados, además que tienen sus cómplices dentro de esos establecimientos de comercio, o tienen sitios ya como parques, sitios aislados a las ciudades donde saben que la persona queda muy vulnerable, la víctima, para acechar y poder cometer este delito como es el hurto.
Aparte del hurto, está la extorsión, las lesiones personales, el homicidio, el secuestro.
Las personas extranjeras han sido muy golpeadas con este modus operandi.
Tips para usar apps de citas sin caer en trampas
- Lo primero que ellos deben hacer es verificar el perfil de esa persona.
- Poder solicitarles una videollamada para establecer que la persona, sea la misma con la que está interactuando en la videollamada.
- Nunca dar los datos personales, tales como lugares de trabajo, en qué trabaja, su lugar de residencia.
- Nunca mostrar fotos de su residencia.
- Que él comparta con una persona de su absoluta confianza el sitio donde va a estar y el nombre de la persona con la que se va a encontrar.
- Si interactúan departiendo licores, bebidas, que esté muy atento, que no le quite la vista nunca a la bebida que está consumiendo. Porque es allí donde aprovechan de suministrar esas bebidas o la benzodiazepina
- Tratar de no llevar a sus casas la primera vez que conozcan a las personas.
¿Qué puede hacer la persona en el momento en que está en riesgo?
Primero, si puede salir de ese sitio, se vale hacerlo.
Segundo, acudir, si está en un establecimiento comercial, a los del bar, aunque no sabemos si ellos son cómplices, pero lo primero es acudir a una persona que le ayude a solicitar la llamada a la Policía Nacional.
Tercero, si es dentro de su casa, antes de ingresar a la casa, pedirle a los agentes de seguridad que la persona que entra con él no está autorizado para salir sin su autorización, que antes de ingresar le tomen los datos de identificación, le pidan su cédula de ciudadanía antes de ingresar a su domicilio.
Utilizar esas aplicaciones es ya casi un imposible prohibirlas, porque es una realidad de la vida, pero hay que utilizarlas con responsabilidad.