Por varios meses se presume que los imputados consolidaron la venta ilegal de marihuana, cocaína y drogas sintéticas en cercanías de varias universidades de la localidad de Chapinero en Bogotá.  Por el peligro que representan para la comunidad estudiantil una juez les dictó medida de aseguramiento intramuros.

Los presuntos integrantes de la red criminal estaban dedicados a la distribución de narcóticos a universitarios en las calles aledañas a los centros educativos ubicados entre las carreras 15 y 16 con calle 75 en Bogotá. Cada noche, en tres horas de venta, comercializaban ilícitamente al menos 100 dosis de marihuana, cocaína o pastillas.

El Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía realizó seguimiento a los vendedores para establecer elementos probatorios contundentes que permitieran inferir la responsabilidad de los procesados en los delitos de concierto para delinquir agravado y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado, que les imputó el fiscal del caso.

A pesar de que cinco de los siete implicados aceptaron cargos, la juez 77 penal con función de control de garantías dictó medida privativa de la libertad en centro carcelario para todos.

La banda de microtráfico

La red tenía de jefe a un hombre conocido como Nipi. Estaba conformada además por dos jóvenes quienes se desempeñaban como químicos empíricos, que sin ningún estudio profesional y medidas sanitarias fabricaban pastillas de alucinógenos, y los restantes al parecer eran comercializadores de las drogas.

Los presuntos integrantes fueron identificados como:

  • Hernán Felipe Caro Gutiérrez, alias Nipi, supuesto cabecilla de la banda y también vendedor. No aceptó cargos.
  • Nicolás Sánchez González, alias Pecas, fungía como químico empírico y aceptó cargos.
  • Jorge Esteban Murillo Molano, alias Naruto, ejercía como químico empírico. Aceptó cargos.
  • Erica Natalia Cruz Ordóñez, alias Nati No aceptó cargos.
  • Santiago Quintero Martínez aceptó cargos.
  • Edwin Javier Rincón Martínez aceptó cargos.
  • Santiago Ballén Trujillo, alias Raider, aceptó cargos. Tiene procesos vigentes en su contra por fuga de presos, tentativa de homicidio y hurto.

Las drogas

En la investigación se evidenció que la mayoría de los integrantes de la estructura delictiva sería consumidora de sustancias ilícitas. Con base en sus testimonios durante las audiencias se reveló que uno de los químicos mezclaba y perfeccionaba las pastillas que fabricaba para producir un narcótico de alta pureza, que no provocara alucinaciones y cuya sensación de placer fuera prolongada.

Agentes encubiertos que infiltraron la organización identificaron su modo de operar y su jerarquía, así como el tipo de drogas que comercializaba y sus componentes.

Entre la oferta de narcóticos ofrecían estaba:

  • Marihuana y su derivado conocido como Wax
  • Cocaína
  • Hongos
  • Drogas sintéticas como Tusy, Poper, Éxtasis y LSD
  • Medicamentos de uso psiquiátrico como Clonazepam

Algunos de los capturados eran conocidos como dealers (mediadores), por ser proveedores personalizados de sustancias ilegales o promocionarse así en redes sociales. También usaban como fachada un café internet y otro local comercial para poder comercializar los alucinógenos, donde además almacenaban, distribuían y ofrecían nuevos narcóticos o simplemente recibían pedidos al por mayor de pastillas, que eran las que fabricaban supuestamente los químicos alias Naruto y alias Pecas en sus viviendas.

En varios allanamientos realizados con orden judicial fueron ubicados equipos y materiales artesanales para la fabricación de pastillas y sustancias prohibidas. También se incautó gran cantidad de marihuana, wax, medicamentos y drogas sintéticas.

La Fiscalía hace pública esta información por considerarla de interés general.