Fueron 10 los capturados luego de las denuncias presentadas por varios ciudadanos del departamento de Boyacá sobre la extorsión de la que venían siendo víctimas.

La Fiscalía Seccional Boyacá inició la investigación y funcionarios del CTI y el Gaula adelantaron operativos en los departamentos de Cundinamarca, Quindío, Caquetá y Caldas, para dar con el paradero de los presuntos extorsionistas.

En las indagaciones se estableció que los judicializados delinquían especialmente en las ciudades de Tunja, Duitama y Sogamoso (Boyaca), desde comienzos del año 2013 y habrían extorsionado por lo menos a 22 ciudadanos.

Asimismo, se evidenció que realizaban las extorsiones por medio de llamadas telefónicas desde diferentes centros penitenciarios del país, sobresaliendo la cárcel de Picaleña en Ibagué (Tolima).

En las llamadas extorsivas a las víctimas, los supuestos responsables simulaban ser policías y/o servidores públicos de diferentes organismos del estado y alegaban tener capturado a un “sobrino” de estas, porque supuestamente le habían hallado su poder un arma, estupefacientes y/o estar involucrado en un accidente de tránsito, entre otros. Además, les decían que debían pagar sumas que oscilan entre los $100 000 y los $9 000 000 para no judicializar al supuesto sobrino.

Una vez las víctimas consignaban las sumas solicitadas, los miembros de la estructura delictiva pedían otra consignación bajo el argumento de que el giro realizado era un soborno a las autoridades, y de no consignar nuevamente, se desplazarían con órdenes de captura para judicializarlos, por lo que nuevamente los afectados terminaban consignando el dinero con el fin de no ser detenidos.

Actualmente la Seccional Boyacá adelanta la investigación de 805 denuncias por este tipo de casos de extorsión bajo la modalidad tío-tío, por lo que se recomienda avisar a las autoridades ante este tipo de llamadas y abstenerse de realizar cualquier tipo de consignación.

MRB/DLBM