Uno de los detenidos, es una mujer de 50 años que amenazó al juez tras conocer la medida de aseguramiento en su contra.
Ante la Fiscalía, una adulta mayor con discapacidad física y un vendedor de comidas rápidas del centro de Pereira, denunciaron las extorsiones de las que eran víctimas. Un hombre y una mujer les exigían el pago de millonarias sumas de dinero, supuestamente, para no atentar en su contra.
El CTI apoyó las labores investigativas que culminaron con la captura de las dos personas sospechosas de las presiones. Una de ellas, es una mujer de 50 años de edad, detenida en flagrancia mientras recibía 300 mil pesos, que serían parte del pago que debía hacer el comerciante para que no le quemaran el puesto de ventas ambulantes.
Gladys Esmeralda Arboleda Álvarez, según las evidencias obtenidas por la Fiscalía, aparentemente se presentaba como integrante de la estructura criminal ‘La Cordillera’, y así aumentaba el nivel de intimidación sobre las víctimas. Con suficiente evidencia en su contra, fue posible ubicarla y presentarla ante un Juez para que responda por los delitos de extorsión agravada.
Tras la lectura de los cargos, la mujer recibió medida de aseguramiento que deberá cumplir en la cárcel. La decisión judicial generó una reacción violenta de la procesada, quien amenazó al juez y, de paso, a su abogado al que culpaba de hacer poco por defenderla. Finalmente los policía custodios y funcionarios del CTI intervinieron, controlaron la situación y llevaron la mujer hacia el centro de reclusión.
Vale la pena indicar que la capturada acaba de cumplir una sentencia condenatoria por homicidio y hace dos meses salió de la cárcel.
El otro capturado fue detenido en el barrio Berlín de Pereira (Risaralda), cuando supuestamente recogía un giro por 600 mil pesos que correspondería a una de las cuotas ilícitas solicitadas. En este caso, la víctima era una mujer adulto mayor quien durante un año accedió a las pretensiones del presunto delincuente.
En audiencias de control de garantías, Arango Román no aceptó los cargos y el juez le impuso una medida no restrictiva de la libertada, que consiste en presentarse periódicamente y colaborar con la captura de otras dos personas vinculadas a la misma actividad delictiva.
PAAM/JARG