La víctima es una estudiante universitatria.
El 6 de mayo de 2016, una joven de 18 años de edad llegó hasta la Unidad Intermedia de Salud del barrio Belén de la capital antioqueña, con varias heridas producidas por arma blanca en su cuello y extremidades superiores. Ante la gravedad de las lesiones, la víctima fue trasladada hasta un centro asistencial de mayor nivel donde le salvaron la vida.
Varios días después y de manera escrita, Michelle Ochoa Palacio, le contó a los investigadores que el autor del atentado fue su propio padrastro Norbey Sánchez Barrera, de 35 años de edad, quien fue capturado por la Policía Nacional en junio del mismo año.
Según la lesionada, su padre de crianza que ya no vivía con ella ni con su madre, le pidió que lo acercara hasta el occidente de Medellín donde se iba a encontrar con otra persona para venderle una motocicleta. La denunciante señala que una vez estacionó el vehículo para que su acompañante se bajara, este la agarró por el cabello e intentó degollarla con un cuchillo.
De acuerdo con la investigación adelantada por un fiscal seccional de la Unidad de Vida, el ataque se produjo porque en reiteradas oportunidades la joven intervenía cuando el hombre intentaba agredir a su madre.
Por estos hechos, Sánchez Barrera, quien labora en la Plaza Mayorista de la capital antioqueña, se allanó a cargos durante la audiencia de acusación y fue sentenciado a 13 años y 4 meses de prisión por el delito de tentativa de homicidio agravado. La sentencia fue proferida por el Juzgado 14 Penal del Circuito de Medellín, con funciones de conocimiento.
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